El boj es un arbusto originario de montes de Europa y Asia, pero hoy se lo puede encontrar en todo el mundo. Su nombre científico es Buxus sempervirens y pertenece a la familia de Buxáceas.
El boj es muy utilizado en jardines y parques por mantenerse siempre verde durante todo el año pero también se valora su madera ya que es muy dura, lo cual lo hace ideal para realizar tallados y fabricación de instrumentos musicales.
Su crecimiento es lento pero puede vivir hasta 600 años el Boj, es muy resistente y no requiere demasiados cuidados. Es muy antiguo el Boj y conocidos sus cualidades terapéuticos. Las cuales se encuentran en la raíz, tallo y hojas de este arbusto, no se utilizan los frutos.
En la edad media se creía que podía hacer crecer el pelo por lo que fue muy popular en esta época pero en realidad no tiene ningún efecto para la calvicie.
Sirve para combatir el reumatismo, hace bajar la fiebre, ayuda en problemas de piel, es útil como laxante y efectivo en dolores de articulaciones, afecciones en la vesícula biliar, gota, erupciones dérmicas, combate psoriasis y para eliminar parásitos intestinales. También es efectivo como antiséptico de uso externo para el cuero cabelludo en particular en dermatitis seborreicas, además tiene propiedades sudoríficas.
Los frutos y hojas son toxicas por lo que se debe tener mucha precaución. Para preparar la raíz y las hojas hay que dejarlas secar a la sombra para luego realizar la decocción.
Para la decocción del Boj se coloca 60 gramos de raíz y hojas secas en 1 litro de agua se la deja hervir 15 minutos luego se puede dejar reposar para que se enfríe y cuando se va a consumirla hay que endulzarla antes de beberla.
En altas dosis puede producir diarrea, dolores abdominales, irritaciones gastrointestinales y problemas nerviosos y en caso extremos la muerte. No deben utilizarla mujeres embarazadas, o en periodo de lactancia, niños menores de 15 años, personas con gastritis y que sufran de hipotensión.
No es recomendable utilizarlo sin consultar antes al medico, para que indique la dosis adecuada y evalúe si realmente es apropiada para la dolencia particular de cada persona.
Un pensamiento en “Boj como planta curativa”